«Alguien me ha dicho que no me corresponden verdaderas velas en este entierro, pero yo me digo que al menos velitas me tocan. Las velas que arrastro prendidas desde la sangre. Las que estoy quemando al volver por escrito a Palestina cuando se enciende el terrible bombardeo de Gaza.» Lina Meruane «¿Usted no conoce su tierra?», le preguntan a Lina Meruane en uno de los cientos de taxis que circulan por su barrio de Nueva York. El taxista, de origen palestino, pronto emprende una campaña sobre la conveniencia del regreso a la tierra de sus ancestros. Será el primer emisario en una serie de sucesos que llevarán a la escritora a realizar dos viajes para «salvar de la extinción un origen compartido». Si el primer viaje -la esplendente incursión genealógica de «Volverse Palestina»- narra el difícil retorno a los territorios ocupados, el segundo -«Volvernos otros»- es un sagaz y delicado regreso reflexivo en el que Meruane aborda, intensa y a veces polémicamente, los escritos y las palabras con las que intelectuales como Edward Said, Amos Oz, David Grossman, Susan Sontag o Mario Vargas Llosa han expresado su visión sobre un conflicto que no parece tener fin. «Alguien me ha dicho que no me corresponden verdaderas velas en este entierro», declara la autora, «pero yo me digo que al menos velitas me tocan. Las velas que arrastro prendidas desde la sangre. Las que estoy quemando al volver por escrito a Palestina cuando se enciende el terrible bombardeo de Gaza». Así se plantea Lina Meruane en este libro que hermana la crónica personal y el ensayo literario y que resulta extraordinario no solo por su valeroso trasunto autobiográfico, sino, sobre todo, por su prosa llena de finezas y de hallazgos. La crítica ha dicho... «Este libro que en rigor son dos, uno de crónica y otro de ensayo, lleva como título una suerte de declaración de guerra, de principios, o una advertencia: Volverse Palestina. Es decir, volverse sospechosa, terrorista, radical, oscura... ¡Peligrosa!» Faride Zerán «Volverse Palestina es una crónica personal, y en vez de escoger el camino de la metáfora, usa el rigor del testimonio que le permite aportar al libro honestidad, una especie de transparencia y sinceridad de Meruane como ser humano, una crónica íntima, personal.» Noche Bengoetxea «Alguna vez nos dijeron que toda escritura era un intento por conocerse a uno mismo. En ese sentido, toda escritura es un volver a uno, un tratar de volver a uno. Volverse Palestina es, en parte, un dibujo y una escritura de ese trayecto, pero es, también, mucho más: es una apuesta por el trayecto, por creer que lo que importa no es nunca llegar sino el camino. Porque en ello se nos va la vida. Y eso no es poco.» Daniel Noemi